La Cueta de Ramón Lueje

 

La Cueta (1.490m) es el primer lugar habitado que baña el río Sil, un Sil niño que comenzó un poco más arriba a correr. Es una aldea humilde pero de porte agradable, con sus casas limpias de antojanas y patios enlosados. Se sitúa entre la grandeza de sus montañas y tiene el vivir de sus puertos. Lo son de su propiedad los de Cebolleo, Laviedo, Lagüezos, Rebezo, Ranadoiro, Ladreras, Vega Redonda, La Orvia y Vagina Luenga, y están en sus aguas los de Cotalbo, Covalancho y Calderones, los que por una ley, que no es la natural, son de Torre.
Del puerto de Cotalbo se corre por Babia un viejo y curioso cuento. Dicen que para decidir sobre su pertenencia llevaron hasta aquellos altos a un cura de notable influencia, quien había jurado, con argucia, que allí pisaba tierra de Torre porque previamente la había puesto dentro de sus zapatos.
En La Cueta son las invernadas largamente duras; allí carga terrible la nieve que todo lo cubre, lo pone raso y deja inmovilizada la vida meses enteros. Sus gentes que han de pasar ese tiempo de Calecho, que es la tertulia de la tarde, y de Filandón, que es la tertulia de la noche, son optimistas ante todos los rigores y animosos para hacer frente a sus fatigas; tienen alegría ante las nieves, ante las montañas, y alegría y afabilidad para los visitantes. Son todos simples pastores, fuertes de cuerpo y sanos de espíritu, merecedores de que lo de las arenas auríferas del Sil fueran para ellos una verdad tangible.
Por la canada del río, hacia abajo, apretado por las penas de Ladreras, de la Orvia y las estribaciones del sistema de Montigüeiro, marcha la vía principal de comunicación que es el camino carretero que va a los barrios de Quejo y Cacabillo y que sale a Vega de Viejos sobre la carretera del Puerto de Somiedo. Del pueblo al noroeste se abre el valle de Fasgares por donde se toma otro buen camino que remonta a la collada del Mixadeiro, pasa el valle de Ladreras y sigue por Branaqueimada, el valle del Salgueiro y Buenmartín hasta Santa María del Puerto. Y para el este, aguas arriba del Sil, va el camino que sube por Bustosil y Cebollero al Puerto de la Paredina.
Para marchar hacia la Sierra de Lagüezos, que es la arista mayor de la Cordillera, hay que coger por la apertura del Reguero de las Borras, en dirección fija al Norte. A la entrada quedan los prados de los Reguerales; en ellos sobre su izquierda, bifurca un camino que bordea el cerro de la Curueza y asciende hasta el Puerto del Muñón, y siguiendo a la derecha se va por el puertote Sobre-el-Agua, el más directo, que faldea la pena Chana(1945), cruza por la pradera de las Suertes, a la fuente Forcada, y sale a Las Cruces. En aquel sitio, marcado en la campera está el límite provincial.

J. Ramón Lueje. Revista Agrupación de Montana Torrecerredo, Marzo, 1953.